En los manuscritos de Peirce hemos podido encontrar al menos 76 textos (disponibles en Inglés o en Francés) más o menos definitorios del signo que pueden reagruparse en dos conceptualizaciones sucesivas, la segunda de las cuales incluye a la primera. Las características esenciales son las siguientes:
- todo signo es triádico, es decir que necesita la cooperación de tres instancias que son el signo S (lo que representa), el objeto O (lo que se representa) y el interpretante I que produce su relación;
- esta cooperación se obtiene mediante el juego de dos determinaciones sucesivas del signo S por el objeto O y del interpretante I por el signo S de manera que I está determinado por O a través de S.
Esto puede resumirse en el siguiente esquema:
en el que las flechas representan determinaciones y el signo
una relación
triádica que vincula S, O e I.
- además observamos que, ya que I está determinado
por O, se vuelve en cierto modo en un signo de O por la misma
razón que S. Es factible entonces determinar un nuevo interpretante
y así sucesivamente. Se vuelve de modo inevitable a un
proceso de interpretación indefinido (en el estado actual
de la conceptualización) que puede representarse mediante
este otro esquema:
Combinando esas definiciones con la fenomenología peirceana podremos dar una explicación formal de la definición de Peirce según la cual un signo es "un medium para la comunicación de una forma".
Indice de la zona azul. Recorrido aconsejado.