Recorrido aconsejado..
Todo signo es un objeto de experiencia, por lo tanto la
percepción de sus diferentes elementos goza de la evidencia de lo
percibido. Al comienzo del proceso el intérprete está convencido de la
realidad de la representación. Todo el proceso inferencial consistirá en
producir una serie de signos más desarrollados. El objeto del signo se
vuelve entonces un sujeto de investigación. Los argumentos empleados en
todo momento aseguran el pasaje de una representación real a otra
representación real de un objeto que aún no está determinado. El
intérprete del signo los considera necesariamente válidos aún cuando no
puede probarse su validez o evaluarse su probabilidad. La regla es la
del crecimiento en complejidad de la representación ya que hay que pasar
de una representación parcial de la "molécula fenomenológica" a su
representación total que es la única que producirá la presencia en la
mente del intérprete del objeto del signo.
Sin embargo en cada
paso la nueva representación es correlativa a la presencia en la mente
de un determinado objeto fugaz, incompleto y provisorio y la
convergencia de esos objetos hacia un objeto estable que es la única que
puede indicar que la investigación alcanzó su objetivo. La regla
consiste entonces en que la investigación se detiene cuando ninguna
inferencia posible transforma la representación de un determinado
estadio de su desarrollo y que el objeto construído en ese instante se
tome como el objeto del signo. Queda claro que ese objeto puede no ser
el que determinó el signo y que la descripción de los procesos
semióticos abre también la de las dificultades de la comunicación. Hace
estallar la disimetría entre producción e
interpretación: la primera es una elección de representación, la
segunda es una investigación sobre esa elección .
La modelización del proceso semiótico consistirá en distinguir las
grandes etapas de esta serie por medio de una categorización de sus
elementos. Constituirá un afinamiento de la teoría
ya que tomará a su cargo su aspecto dinámico. Estas etapas se
caracterizarán mediante tres tipos de inferencia.
Indice de la zona roja.
Recorrido aconsejado.