Hemos estudiado un ejemplo de argumento deductivo (el cartel
de la ruta "Atención con el fuego").
Representa la certeza absoluta de comunicar el fuego en el bosque con
todo objeto inflamable. Todo interpretante está obligado a llegar a esa
conclusión, inclusive el piromaníaco quien, incitado por las imágenes de
las llamas, verá reconfortados sus oscuros propósitos.
Tomemos el
ejemplo de Peirce. Las premisas son las siguientes:
- Todos los porotos de esta bolsa son blancos
- Estos porotos provienen de esta bolsa
y la conclusión es
evidente (modo de expresar la certeza absoluta)
- Estos porotos son blancos.
Este caso como el precedente es un argumento deductivo necesario.
Se distingue también la deducción probable en la que la conclusión no es
segura pero en la que se está seguro de que, si la situación
representada por las premisas se reiterara un gran número de veces, la
proporción de los casos en los que premisas y conclusión coexistirían se
acercaría a una frecuencia determinada. Es el razonamiento que, por
ejemplo, puede hacer un comerciante que, al instalarse en un barrio en
el que el 60% de la población tiene un bajo ingreso, arma su stock con
un 60% de artículos de baja calidad.
Las matemáticas y los modelos hipotético-deductivos sólo admiten
la deducción necesaria; la estadística es el dominio privilegiado de la
deducción probable (modelos stockásticos).
Indice de la zona roja. Recorrido aconsejado.